Últimamente se escucha mucho el término de “Inbound Marketing” dentro del campo del marketing online pero, ¿qué significa realmente este término y qué es lo que conlleva?
El Inbound Marketing, también conocido como marketing de atracción, puede definirse como una estrategia de marketing no intrusiva, que se ha adaptado al nuevo comportamiento de los consumidores y, en lugar de bombardearlos con mensajes publicitarios, los invita a participar de sus contenidos y a interactuar con la marca sin ningún tipo de imposición.
Su principal objetivo, por supuesto, es la captación de nuevos usuarios/clientes a través de la aportación de nuevos valores. Para ello, se sirve de diversas técnicas propias del marketing digital, como lo son el posicionamiento SEO, el marketing de contenidos, el Social Media Marketing y la analítica web. Técnicas que son incorporadas a una estrategia de marketing global, y que se combinan en diferentes canales para conseguir mejorar la reputación de la marca y aumentar su visibilidad en la red.
De esta forma, deducimos que las acciones principales que se llevan a cabo dentro del Inbound Marketing son:
1.- Posicionamiento web: Optimizar la estructura y el contenido de nuestra página web para que aparezca en los primeros resultados de los principales buscadores.
2.- Creación de contenido de calidad: Siempre buscando la atracción de nuestros posibles clientes, que responda a sus preguntas y necesidades y que, en definitiva, les sea de utilidad.
3.- Difusión a través de las redes sociales: Las redes sociales son increíblemente útiles para interactuar con los usuarios, sean clientes o no. Una buena gestión de la presencia de la marca en las redes puede reportarnos un aumento considerable de visibilidad para nuestra marca.
4.- Análisis: Gracias a esta técnica podemos convertir en datos tangibles los resultados de todas las acciones anteriores, permitiéndonos comprobar si la estrategia está funcionando según los objetivos que nos hemos marcado.
Gracias a estas técnicas y acciones, aumentarán nuestras probabilidades de atraer a los usuarios y animarlos a convertirse en leads (personas que han facilitado sus datos personales a una empresa, de forma voluntaria, a través de un formulario web), todo siempre por iniciativa propia del cliente.